Los datos en torno a la Navidad deben preocuparnos en su justa medida y de seguir subiendo descaradamente los contagios gracias a que ómicron se está haciendo con el poder, solo hay que esperar a que caigan en picado como dicen que ocurre en Dinamarca,Noruega y Sudáfrica. No perdamos la esperanza de que se logre la inmunidad de rebaño más pronto que tarde y que nos deje en paz la pandemia.
Un dato alentador es la ralentización de los fallecidos y estos están bien contados y es de esperar que disminuyan a medida que la ómicron se haga dueña de los contagios.Nos quedan los fallecidos que aún la delta no dejará escapar y en ello han de ocuparse nuestros recursos.
La transición al ómicron parece un paso adelante del coronavirus para sobrevivir acatarrándonos y poco más.Desde este punto de vista hay que desearle suerte y que se imponga rápido en todo el mundo, más rapido que las vacunas contra la delta que no les llegan por muchos esfuerzos que se hagan,la infraestrucura no es la adecuada y con suerte el virús hará el buen trabajo que los humanos no hemos sido capaces de hacer.
En suma estas letras tratan de transmitir la esperanza de la tendencia del virus de sobrevivir y para lo cual nos necesita y no perderá la oportunidad en un mundo de posibilidades.
Las transiciones son complicadas en interpretar datos, en breve habrá que reducir las cuarentenas para salvar el tejido productivo y de servicios y pronto se irá a trabajar con el catarro como siempre sin más antígenos ni pcr. Es un deseo formulado aquí,en este momento y que podría cumplirse en unos sitios antes que en otros.Veamos y esperemos.
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