El tema es complicado y las decisiones serán diversas, unas entendibles y otras no tanto. Al final hay que acatar lo que la legislación mande. La obligación de vacunarse no parece que sea posible. La necesidad de vacunarse en distintos ambientes la impondrán las administraciones o las empresas castigando a quien no cumpla y el individuo tiene que decidir la opción que más le interese e incluso pleitear contar la Administración o las empresas.
El sentido común deja de serlo al enfrentar lo que espera la mayoría y la decisión del individuo, Así vemos como grandes empresas en EEUU exigen vacuna o te despiden. En Grecia despiden a sanitarios en la pública y en la privada si no se vacunan y multan a las empresas que den trabajo a no vacunados en el sector sanitario. Cada día veremos como se comportan los distintos sectores de los distintos países al respecto y habrá explicaciones de todo tipo.
El Negacionismo existe y es más importante en unos países que en otros, en unos sectores que en otros. En nuestro país ha sido escaso si bien todos conocemos a personas que no están dispuestas a vacunarse por distintos motivos: que si experimentan con nosotros y no es natural dejarse vacunar es una explicación que abunda, existen más motivos inconfesables desde fobias específicas a miedos a los que todos nos enfrentamos, unos los superamos tapándonos los ojos y otros no pueden tapárselos y persisten en no vacunarse y parece lógico aceptar sus decisiones. El miedo también mueve a los gestores de empresas y toman decisiones que favorezcan el buen funcionamiento aunque haya que imponer que se vacune su gente. El miedo también afecta a los legisladores que lo tienen complicado al tener que decidir si el bien de muchos exige la imposición individual de uno.
El miedo nos hace ser prudentes y por ello se mueven las masas muchas veces imprudentemente (como intentar subir al avión en Kabul). No es fácil ser razonables en situaciones extremas.
Focalizar el tema en la vacunación es una forma de distraernos de cosas más importantes, la vacunación sola no nos sacará de la pandemia, necesitamos suerte con la cepas futuras y mantener medidas varias como las del queso suizo. Siempre me quedo con la cepa benigna que conviva con los humanos razonablemente. Esperar y ver. También tengo miedo de lo contrario.
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